jueves, 23 de septiembre de 2021

Esto todavía no se acaba

 

Muchas gracias, preciosa, me enternece que te hayas acordado en medio de tanta confusión y no poca histeria. Me alejé del Facebook como lo haría de un incendio porque me ensordecieron los gritos de tantos de mis amigos y amigas buscando aclarar (declarar, documentar, vociferar) que ellos o ellas fueron los primeros en donar, en vincular, en asistir a los damnificados ¡dos veces!, que están sufriendo casi tanto como las víctimas y que debemos cantar el himno nacional, porque ahora, súbitamente, son los mexicanos más orgullosos de la historia. Por lo demás, desde el año 85 todos sabemos que ese México extravagante está ahí, capaz de darlo todo por su vecino e incapaz de autoprocurarse un gobierno decente. Como verás, querida, mi confusión es grande.

Pero bueno, debido a tanto funesto acontecimiento, debes saber que he decidido prolongar mi cumpleaños el resto del año, de modo que a partir de mañana comenzará el verdadero festejo, espero que sea un relato largo, reposado, que incluya arte, literatura y fantasías. Se va a poner bien padre. Pero, sobre todo, esto todavía no se acaba.

Te mando muchos abrazos y besos esperando que todos estén bien, quiera Tezcatlipoca que un buen día de este año podamos vernos para abrazarnos como él manda.


.


miércoles, 15 de septiembre de 2021

Levántate y fuma

                                 

Querido Pepe: quiero que te levantes de tu cama para poder cumplirte tu deseo de hacer una fiesta de disfraces; quiero verte el sábado ahí. Y el mes que entra también y festejar tu cumpleaños número 96 el 15 de septiembre; quiero que te levantes, Pepe, o que te mueras ya, pues no soporto –y tú menos que nadie– a un anciano entubado y dependiente, incapaz de moverse y de correr como tú lo haces; de ir al baño, de subir y bajar las escaleras; de podar los rosales y plantar los geranios que se te dan tan bien; no soporto la espera de una muerte inminente si ya no estás bien, si ya no podrás caminar a tu mesa, tomarte tu tequila y fumarte mis cigarros; eso no es poesía, Pepe, eso no es vida. Ahora, si te compones, olvidaremos todos los presagios. Te espero ahí en Teorema y, si no, tú espérame allá, del lado de la poesía.

Como sabemos, Pepe decidió esperarme –a mí y a ustedes– allá, en la cosa esperada, el silencio obligado, la impostura celestial en la que por supuesto no creía, por más que en sus últimos años aludiera a Dios, hiciera como que comulgaba con la idea poética de un creador, de algo absurdamente desconocido que todos, con los nombres y apariencias diversas, terminamos por sospechar.

No le daré muchas vueltas a esto: no creo en el cielo, el de la religión, pero no puedo negar que sobre nuestras cabezas hay un universo que llamamos cielo y al cual pertenecemos ineludiblemente. 

Hablé muchas veces de esto con Pepe Donoso. Coincidía conmigo en que somos polvo de estrellas, tal vez insignificantes frente a la grandeza del universo, pero con la divina sustancia de la inteligencia, la conciencia de saberse parte del universo. Hoy cumpliría 96 años terrenales.

El gran Glenn Miller interpretaba un tema de Hoagy Carmichael llamado Stardust, “polvo de estrellas” que, aunque es una evocación poco religiosa, permítanme decirles que yo creo en eso, no en el hecho de que seamos una canción, aunque algunos de nosotros somos bien “músicas”, sino en el que seamos polvo de estrellas, resabios muy antiguos de enormes explosiones estelares que resultaron de la combinación de elementos químicos y de condiciones térmicas.

Si algo distinguía a nuestro querido amigo Pepe era el humor, nunca autocomplaciente; el humor mordaz, escatológico si se le permitía; vulgar si venía al caso, presto en todo momento al juego de palabras, al escape lúdico, a veces insensato, del idioma.


martes, 14 de septiembre de 2021

Los motivos

 


Usted cultiva media docena de “ideas” que ha ido desarrollado en su vida. Los periodos de Picasso podrían ser una burda pero útil explicación de esas fases que por largos periodos gobiernan nuestras vidas. Tres o cuatro importantes.

¿Ingeniero? Te ando buscando.

Yo cultivo media docena de ideas –fijas– y las exploto sin compasión. Repetirlas, reconstruirlas es lo que me hace dichoso. Creo.

sábado, 11 de septiembre de 2021

Seres universos


Somos universos para las bacterias, parte de un organismo menos mineral que biológico, un universo compuesto de gases y carbonatos,  nosotros mismos existencias universales.

Somos un universo para millones de seres que habitan los rincones de nuestro cuerpo, organismos que entran y salen de nosotros para su breve existencia. Aunque eso también es relativo ¿importa el tiempo a una bacteria? Seremos eternos para la mayoría de ellas. Nuestros órganos actúan como municipios o distritos para el mantenimiento de la estructura. En nuestro cuerpo ocurren miles de interacciones de esos pequeñísimos seres vivos, que transmiten órdenes y consejos entre sí, electricidad; somos la causa última de su existencia; seres atemporales que habitan el cuerpo humano.

Si lo que predomina en nuestro universo formado por galaxias son gases, nuestro cuerpo también depende en sus niveles atómicos y moleculares de media docena de elementos químicos que reconocemos como carbono, hidrógeno, oxígeno, nitrógeno, azufre y fósforo. Es el aparato universal en el que conviven 38 billones de células, de las cuales siete de cada diez son glóbulos rojos o hematíes de la sangre. Se supone que podrían existir 10 bacterias por cada célula, lo que da por resultado la nada despreciable población de  380 billones de individuos adheridos o transitorios en nuestra estructura compuesta de cabeza, tronco y extremidades, aparatos y sistemas, formados por órganos, a su vez formados por tejidos; ellos formados por células, compuestas de átomos.

38 x 1012 bacterias que representan un peso aproximado de 200 gramos, más o menos la fluctuación diaria de peso en un humano, pero en esos doscientos gramos habitan miles de millones de serecillos invisibles a nuestra mirada que siempre es preferible no conocer personalmente. Buena parte de ellas bacterias benignas que cumplen funciones de mantenimiento imprescindibles. La mayor parte se localiza en el intestino grueso, en el intestino delgado, la cavidad oral y anal y en la piel. Podrían existir 10 bacterias por cada célula, 38 x 1012 bacterias ¿a quién le importa? Tal vez a nadie, pero ahí están.

domingo, 5 de septiembre de 2021

Cultura popular

 


No existe solo una definición para explicar la cultura popular, no cabe en un solo concepto, existen las opiniones de especialistas que hace décadas estudian este fenómeno desde el análisis académico. Un asunto de varias dimensiones donde el gobierno de un estado, de una ciudad,  puede tener una participación importante en los procesos de placer social que se reconoce en la cultura popular.

Si alguien lo ha discutido es Néstor García Canclini, que afirma en su libro Culturas Híbridas: estrategias para entrar y salir de la modernidad, que la cultura popular es un ámbito de estudio cuya complejidad surge de los diversos cruces e hibridaciones y de la existencia de un objeto que permanentemente se vuelve esquivo a la investigación por su perenne evolución y dinámica. Dinamismo que surge, de hecho, desde la propia concepción del ámbito de la cultura popular como un campo de lucha. Canclini ve reelaboraciones y transformaciones permanentes de la cultura popular.

 

Otro estudioso de la cultura popular, Jesús Martín-Barbero, observa en Cultura popular y comunicación de masas, que el proceso de masificación cultural producido en el siglo XIX da lugar a otro fenómeno con respecto a la cultura popular. Ya no designará los objetos culturales creados por los sectores del pueblo, sino la cultura que consumirá la masa. Sin embargo los objetos permanecen ahí, son la obra cultural de los pueblos que no desaparece porque la radio toque todo el día a Michael Jackson. James Bowman, editor del Times Literary Supplement en Londres, hace notar que existe una cultura popular oficial y una no oficial, y que a través de la historia ha habido culturas oficiales y no oficiales. Los jóvenes han gravitado hacia la cultura no oficial abierta, libre y carente de estructura. ¿Cómo canalizarlo?

Otro estudioso del fenómeno de la cultura popular, Claudio Lobeto, afirma que en los años '60 y '70 artistas e intelectuales se vincularon con los sectores sociales subalternos, lo que significó que se creara un "arte comprometido con el pueblo" en oposición a la noción del "arte burgués”. Afirma que la "hibridez" universaliza la cultural popular, se torna cotidiana y supera la clasificación, “el arte culto se mixtura con lo masivo, lo popular se nutre de la cultura de masas, la publicidad tiñe la estética popular y así sucesivamente es posible seguir desagregando –afirma Lobeto–, relacionando e integrando manifestaciones culturales de diversa índole y procedencias”.

En algún momento me tocó analizar la cultura popular en Puebla, lo que observé fue una gama de subculturas alternativas y marginadas, autoexcluidas o integradas, manifestaciones reivindicatorias, arte originario y contraculturas o el mero resabio del consumo televisivo, que se atraviesan entre sí en continuo movimiento, resultando inmersa en una dinámica donde la cultura popular también se reconstruye a cada instante. ¿Cómo influir en ese caos? Si ahora lo elitista, lo popular y lo masivo como categorías resultan insuficientes para clasificar fenómenos culturales y artísticos, como opina Lobeto, la única vía de acción es evitar la parálisis, ser creativos en las instancias destinadas para ese efecto cultural. ¿La sociedad cuenta con un organismo plural donde están representados todos los gobiernos y sectores de la sociedad? 

El estudioso estadounidense, Stuart Hall, en sus Notas sobre la deconstrucción de “lo popular”, observa que la cultura popular trae aparejada una resonancia afirmativa por la prominencia de la palabra "popular". Y que, en algún sentido, la cultura popular siempre tiene su base en las experiencias, los placeres, los recuerdos, las tradiciones de la gente. Está en conexión con las esperanzas y aspiraciones sociales, tragedias y escenarios locales, que son las prácticas y las experiencias diarias del pueblo común.

Hall afirma que lo popular fija la autenticidad de las formas populares. “Siempre hay posiciones para ganar en la cultura popular –dice–, pero ninguna batalla puede atraer a la cultura popular en sí hacia nuestro lado, o para el lado contrario”.  Dicho de otra forma, no es posible apropiarse de la cultura popular, a los gobiernos solo les toca sembrar, discutir sus programas y tomar mejores decisiones. O asumir decisiones políticas respecto a la cultura. Su obligación es cuidar que sus programas se mantengan vigentes y no sean elegidos por ocurrencias. Y no estorbar a la cultura popular, impulsarla, fortalecerla, estimular su autorreplicación.

Lo único que me ha quedado claro de todo este periplo sobre la cultura social es la complejidad del tema…

 

 

Bibliografía

García Canclini, Néstor. Culturas Híbridas: estrategias para entrar y salir de la modernidad. Sudamericana. Buenos Aires. 1992.

Martín-Barbero, Jesús. Cultura popular y comunicación de masas.

Culturas populares. En Términos críticos de sociología de la cultura. Buenos Aires, Paidós, 2002.

Lobeto, Claudio: Cultura popular: hacia una redefinición, Instituto Internacional del Desarrollo, Universidad de Buenos Aires, tomado de internet: ucm.es/info

Hall, Stuart. Notas sobre la deconstrucción de “lo popular”. En Historia popular y teoría socialista. Barcelona, Crítica, 1984.

Bowman, James, Cultura Pop, Facetas No. 99, Enero, 1993. USIA Information Service. Tomado del internet: www.mty.itesm.mx

Lara, José: Las culturas populares e indígenas, símbolos de cohesión e identidad nacional, http://www.conaculta.gob.mx/saladeprensa/2004/26feb/cultpops.htm

 

 Fotos de piezas de barro del autor

.