domingo, 31 de enero de 2010

Ya Baz


En 1894 nace en Tlalnepantla, Estado de México, Gustavo Baz Prada, un singular personaje de nuestra historia que sería prominente médico, revolucionario, político y científico y muestra patente de que en el PRI no todo estaba podrido, de que en todos lados y todas las épocas hay gente de gran valor que funda lo mejor de los pueblos.

Gustavo Baz fue gobernador zapatista de su estado a los 17 años y, contra todo pronóstico, en el breve tiempo que gobernó hizo una labor encomiable: inició reformas sociales que cobraron sentido después de la guerra, como la reforma al artículo 602 que prácticamente congeló las rentas abusivas; después fue senador y secretario de salubridad y asistencia, rector de la UNAM, ministro de varios gabinetes, gobernador por segunda vez y, todavía en 1985, a los 91 años, en su último cargo, dirigía el Hospital de Jesús de la ciudad de México.

Cuando imagino un país que yo quisiera tener no puedo dejar de contemplar personajes como el doctor Baz, como su homólogo Ignacio Chávez, que coincidentemente nace también este día, tres años después de son Gustavo, en Zirándaro, Guerrero, para ser uno de los primeros cardiólogos destacados de nuestra medicina y también rector de la UNAM. ¿Dónde están esos héroes sin monumento? ¿por qué debemos conformarnos con los políticos leguleyos?



sábado, 30 de enero de 2010

Palmerín


En 1944 muere Ricardo Palmerín a los sesenta años de edad. Palmerín era un hombre de semblante alegre, estatura mediana y constitución robusta; no fumaba, bebía metódicamente y, de acuerdo a sus amigos, un gran conversador, siempre acompañado de su inseparable guitarra.

El autor de las célebres canciones Peregrina y Las Golondrinas, introdujo a México una concepción propia del bambuco colombiano que adaptó a la canción yucateca. Por lo demás, Palmerín llevó una vida bohemia, despreocupada y tal vez demasiado modesta, considerando la magnitud de su inspiración y los alcances de su fama. Hombre de gran capacidad creativa, se dice que confesó a un amigo haber perdido un cuaderno donde tenía 400 canciones inéditas que se perdieron para siempre.



Bienvenida Guaname a mi blog.




viernes, 29 de enero de 2010

jueves, 28 de enero de 2010

Estadismo y estulticia


Anoche Barak Obama dio a los políticos del mundo occidental una lección de política y de estadismo, poniendo en claro la diferencia abismal que existe entre un presidente del montón y un estadista, es decir, en nuestro caso, entre Felipe Calderón y él. Mientras el de aquí anduvo presumiendo en diciembre que las reservas federales habían aumentado a 90 mil millones de dólares, cifra récord en la historia (pero no se le ocurre, no tiene la menor idea de qué hacer con ellos), Obama en media hora dispuso de muchos miles de millones de dólares para fortalecer el empleo, la pequeña empresa, la educación y su llevada y traída reforma de salud. Su discurso fue refrescante para las anquilosadas “democracias” que rebosan de burócratas y politicastros que sólo se mueven por el botín económico y político, incluidos los Estados Unidos, por supuesto, a cuyos políticos cuestionó su compromiso con la politiquería y no con el pueblo estadunidense. Y de paso ofreció las lecciones elementales a los países que, como el nuestro, no hallan qué hacer con su clase política enmarañada en un litigio de poder sin contemplación de ideologías, planes de gobierno, políticas de estado y, mucho menos, el bienestar de sus gobernados.

¿Cuándo será posible producir un estadista en México?, un gobernante que tome decisiones y sea capaz de reunir los intereses de las facciones en torno a una idea de progreso, o al menos, de mejoría nacional. Me acosté taciturno la noche de anoche. Inquieto. Soñé que Felipe Calderón era capaz de asistir al congreso y, tras una autocrítica a la inmovilidad de la clase gobernante, terminaba su discurso con estas palabras:

“Nos enfrentamos, pues, a retos grandes y difíciles. Y lo que esperan los mexicanos --lo que merecen-- es que todos nosotros, panistas, priístas y perredistas, resolvamos nuestras diferencias; que nos sobrepongamos al peso entorpecedor de nuestras disputas políticas. Porque, aunque quienes nos eligieron para nuestros puestos tienen distintos orígenes, distintas experiencias y distintas creencias, las angustias que sufren son las mismas. Las aspiraciones que tienen son comunes a todos. Un puesto de trabajo que permita pagar las facturas. Una oportunidad de progresar. Y, sobre todo, la capacidad de dar a nuestros hijos una vida mejor”.

En eso sonó el despertador. Estaba en Puebla. En México. Calderón había entablado una disputa legal para abolir la ley de matrimonios gay en la ciudad capital.

Por si fuera poco, y este es el rasgo ridículo de la presentación de anoche del presidente Obama, la sesión propició el descenso de por lo menos dos kilogramos de peso por legislador - al menos los demócratas-, pues en un grotesco ejercicio de calistenia se pararon y se sentaron ochenta veces para aplaudir al presidente, evidenciando que aquí y allá, la política y los políticos son igual de lisonjeros y patéticos. Pero esa es otra historia.



martes, 26 de enero de 2010

Impudicias edificantes


En 1938 muere a los 79 años Matilde Montoya, cuyo nombre nos dice poco, no así su obra. Matilde fue la primera médica cirujana en México, que entre otros sitios estudió medicina en condiciones adversas, pues fue rechazada por profesores, autoridades y sectores sociales que la tachaban de "impúdica y peligrosa mujer, que quiere ver cadáveres de hombres desnudos". Y sí, en efecto vio muchos hombres encuerados, a quienes de paso salvó la vida.

Cuando pienso en los valores de los mexicanos pienso en gente como doña Matilde, que abrió el camino a miles de jóvenes mujeres que la siguieron en el estudio de la medicina y que hoy pueblan los hospitales y clínicas del país. ¿Acaso no merecería mayor justicia su obra? ¿un hospital, un centro especializado con su nombre? Sin duda que sí. En el 50 aniversario de su fallecimiento, en 1988, se erigió un busto de bronce en su memoria en el jardín José Martí, frente al centro médico Siglo XXI, cuando lo correcto hubiera sido instalar un busto en memoria de Martí en el jardín Matilde Montoya. Pero, bueno, peor es nada.



lunes, 25 de enero de 2010

Llegaron los dientones


Con gran aflicción, este fin de semana descubrí en los camellones de la 11 sur, la principal avenida que atraviesa Puebla, la llegada de los precandidatos de algunas de las ofertas del supermercado electoral, el monopolio de los partidos políticos. Estarán ahí hasta finales de febrero, cuando las distintas franquicias comiencen a revelar la identidad de los ganadores de las candidaturas oficiales; entonces se quitarán a algunos de los dientones y se pondrán carteles más grandes de los dientones ganadores, ahora sí, la mayoría radiantes.

Por el momento los dientones muestran un mohín que pretende ser una sonrisa honesta que a su vez muestre buena voluntad, decencia sin límites y ocasional limpieza dental. Muy pocos lo logran en realidad. Los hay guapos y feos, cachetones y flacos, peinados y greñudos, avivados y mortecinos; la mayoría más rosaditos que en la realidad, con unos dientes sospechosamente fotoshopeados, pieles tersas, sin sus famosas verruguitas, sin aquellos bigotitos incomodones en el caso de las damas; sin las arruguitas que ostentaban apenas ayer al mediodía.

Casi todos los dientones hablan de progreso, de bienestar familiar, de educación y de un titipuchal de temas que en la práctica no volverán a mencionar, pues todos los espectadores sabemos que no les interesan en absoluto, y que lo único que quieren es llegar al escaño o al puesto en disputa para volverse millonarios (seis milloncejos se embolsa un diputado federal en sus tres años de gestión, sólo por hablar de los dineros lícitos que llegan a sus ansiosos bolsillos), para viajar por todo el mundo, para por fin tener un BMW y cualquier excentricidad que se te ocurra en este país de muertos de hambre.

Paradójico país el nuestro, dos realidades contrastantes. Colgados sobre los postes una legión de dientones mentirosos, caminando sobre las banquetas los más tristes semblantes de la realidad, bocas secas y estómagos vacíos. “¿De qué se ríen, pues?”, nos preguntamos atribulados, cuánto tiempo más nos dejaremos engañar por sus falsas sonrisas.


domingo, 24 de enero de 2010

Mamíferos


Este día de 1922 nace en el sur de Estados Unidos una de las divas del cine más bellas de la historia: Ava Gardner. Ernest Heminway, en lo que se supone fue un elogio, la nombró como “el animal más hermoso del mundo”.

Ava fue una dulce sureña que deseaba ser una buena esposa y tener un montón de hermosos hijitos. El destino la condujo por otros senderos, y a los 19 años ya era la sensación de Hollywood.

Famosa por sus escándalos sexuales, Ava, a pesar de sus innumerables aventuras con famosos hombres de la industria, como Haward Hugues, Frank Sinatra, el torero Luis Miguel Dominguín, el director de orquesta Artie Shaw y todos los galanes de sus películas que le pusieron enfrente, ("si no te acuestas con Ava -le dijo Hugues a Robert Mitchum- pensarán que eres maricón"), fue en realidad una estrella solitaria. Una mujer que había sido lo que tantas anhelaban, en la búsqueda de ser tan sólo una bella y buena mujer. Valga lo uno por lo otro, la recuerdo en su 88.

Otra belleza, ésta más cercana, cumple muchos menos años que Ava el día de hoy: mi hermana Belina. Recibe mi cariño y los besos correspondientes a tan respetable altura de tu vida.


sábado, 23 de enero de 2010

Polvo elemental


Este día de 1989 muere uno de los españoles más extravagantes del siglo XX: Salvador Dalí. De algún modo, Dalí representa la sobrevivencia del alma rebelde de los españoles en los difíciles años de las guerras y la prolongada dictadura de Francisco Franco.
Salvador Dalí transitó prácticamente por todas las facetas de la pintura de su siglo. Fue impresionista, cubista, dadaísta y finalmente creador de un arte abstracto y sugestivo.
“Picasso es comunista –dijo Dalí-, yo tampoco”. Y comunista fue lo único que le faltó ser, pues en diferentes momentos de su vida se creyó larva, piojo, dios, mantecado y estatua rococó.

Dalí escribió con rebuscada prosa las páginas más extrañas y absurdas de la literatura española. Y si otros artistas eran previsibles, no lo era Dalí, que siempre tuvo el genio y la templanza para sorprender a los más escépticos, así como fascinar a sus muchos incondicionales.

El día de hoy viajó de su amada Figueras, en Gerona, a otro planeta, en una locura seguramente materialista, muy a su estilo, donde se convirtió en partícula elemental, polvo del universo.



viernes, 22 de enero de 2010

La vil historia del garrote


En 1812 la lucha por la independencia había cumplido ya dos años de guerra. Este día, las cortes insurgentes disponen la abolición de la pena de horca. Buscando encontrar algo más "moderno", la sustituyeron con el garrote vil, un original invento español que consistía en una silla donde sentaban al ejecutado para producirle una muerte terrible. Era sumamente efectivo, desde atrás, un tornillo se introducía en tu cuello hasta que escuchabas un crujido, era cuando hacía pomada tus vértebras; en algún momento cortaba la circulación de sangre y, por fin, la vida.

El garrote vil se dejó de usar en el México independiente (inventamos métodos más discretos y rápidos, como aquel de “mátelos en caliente”), pero en España se siguió usando hasta el final del régimen de Franco. La última mujer sacrificada así fue en la década de los cuarenta, en tanto que el 2 de marzo de 1974 fueron ejecutados con este método Heinz Ches y Salvador Puig Antich, con lo que obtuvieron el premio Ginness como los últimos ejecutados oficiales por el garrote vil, una verguenza para la humanidad.

jueves, 21 de enero de 2010

Coaliciones


Los analistas y los partidos políticos se desgarran las vestiduras en este momento con el tema de las coaliciones electorales. El anatema principal es la conjunción de “los derechistas” del PAN con los “izquierdistas” de PRD en algunos estados, entre los que se encuentra Puebla. Aquí, la diabólica combinación reuniría a estos partidos, junto a convergencia y PT, en torno a la candidatura de un señor que fue priísta toda su vida, nieto de exgobernador y alto funcionario de gobiernos del PRI hace menos de diez años, además de ser claramente ahijado de Elba Esther. Sus convicciones políticas, como a muchos políticos en este país, le permitieron dar un saltito estrambótico para acomodarse en el PAN, donde fue recibido con los brazos abiertos.
Ahora lo quieren mezclar (¡Oh, Dios!) con un grupo de partidos prácticamente inexistentes en esta entidad, un puñado de politiquillos de baja estofa que han aprovechado las diferentes coyunturas para acomodarse como diputados plurinominales en el ámbito federal y estatal, funcionarios de dónde se pueda y eternos asistentes a los mítines de “oposición”. Todos, los unos y los otros, los de derecha y los de izquierda, carecen de ideología propiamente dicha, navegan con los vientos que soplan en el poderoso PRI estatal, los caprichos legales de la dizque reforma electoral y las diversas alquimias que mueven los mecanismos del poder de este desafortunado país. Porque, eso sí, todos ellos son los que se han repartido las diferentes tajadas, tajaditas y migajas de poder que se ofertan cíclicamente en el supermercado político, propiedad de los partidos. Ahí no se pelean, en ese monopolio de propiedad privada de la política mexicana todos los partidos están de acuerdo. “Te toca la gerencia, mano”; “Y tú: ¡a la intendencia!”; “¿Puedo poner a mi pariente de cerillito?”

Dicho lo cual, apoyo enteramente las coaliciones de partidos, y en mi loca postura lo llevo más allá: que también se integre el PRI a la coalición de partidos. Eso nos ahorraría seis meses de desgastantes campañas que podríamos aprovechar, con la cascada de recursos destinados a ella, para debatir si alguno de ellos (ya no hay “ellos”, ahora es uno solo) tuviera alguna idea para sacar a nuestro estado y a nuestro país del atolladero. Hablo de temas muy aburridos como desempleo, corrupción, reformas estratégicas, salud, educación, política cultural, que en esta nueva circunstancia no se resolverían con las famosas frases de campaña habituales: desarrollo y bienestar; consolidación de la democracia; equidad y apertura política, etc., sino mediante análisis ciudadanos sobre las cosas que nos gustaría que cambiaran en este país. El candidato único, producto de la gran coalición, tendría seis meses para escuchar, no las mentiras y exageraciones de sus contendientes, tampoco los golpes bajos sobre sus familiares y sus negocios, sino las necesidades de un pueblo ansioso por hacerse escuchar, a los especialistas de las universidades y los grupos ciudadanos organizados que tienen muchos años proponiendo acciones coherentes a favor del país, no de un partido ni muchos menos de un candidato en particular, que ya nos tienen hasta el gorro.


martes, 19 de enero de 2010

El rey


El 19 de enero de 1926 nació en Dolores Hidalgo, Guanajuato, un hombre que como pocos ha dado satisfacciones a los mexicanos... y alguna que otra pena.

José Alfredo Jiménez fue un poeta natural, espontáneo y algo salvaje. Sus canciones, motivadas por la decepción, el abandono o la simple tristeza causada por una prolongada cruda, casi perenne, por su famosa afición a la bebida, supieron describir con sencillez un sentimiento mexicano que los antropólogos han estudiado durante un siglo y aún no logran descifrar: eso que llaman “mexicanidad”, que José Alfredo simplemente expresó cantando y llorando... con inusitada puntería.

Valga lo uno por lo otro, y más allá de que alguien recuerde a José Alfredo, su memoria estará siempre aquí, como parte de una conciencia nacional, o al menos, de la memoria colectiva. “Y, manque sea martes, sírvame otro tequila…”


lunes, 18 de enero de 2010

Frases de memoria




Tenía tan mala memoria que se olvidó de que tenía mala memoria y se acordó de todo.

Ramón Gómez de la Serna (1891-1963)

domingo, 17 de enero de 2010

El milonguero


Este día de 1989 muere el cantante y poeta uruguayo Alfredo Zitarrosa, una flor extraña en el variopinto mundo de los llamados folcloristas. Zitarrosa confesó haberse dedicado a la música por que era un mal poeta, pero sus seguidores a lo largo de tres décadas constatamos que era buen músico y también buen poeta.

Las palabras en sus canciones eran encadenadas por el suave ritmo de la milonga pero sobre todo por una sensibilidad social que sólo Zitarrosa supo traducir. Era un poeta de muchas palabras, todas ellas importantes, que encontraban la manera de desentrañar el conflictivo mundo de los seres humanos.

Hay amor, pero en el amor hay pena, y en la pena hay una explicación, y en la explicación está la vergüenza, y en la vergüenza hay inocencia, en la inocencia frescura, en la frescura niñez, en la niñez cuna y en la cuna esperanza. Es decir... sólo había un Alfredo Zitarrosa.


sábado, 16 de enero de 2010

No beberás


Este día del año 1920 en Estados Unidos se comete un gran error: se decreta la Ley Seca. El presidente Thomas Wilson, que venía gobernando desde 1916, había sobrellevado una guerra mundial y era el hombre importante en la creación de la Sociedad de Naciones en 1918, tenía la firme convicción de que “todo era posible” si se hablaba del pueblo “americano”. Por eso, a partir de hoy, decretó: “No beberás...”

El resultado, ya lo sabemos, fue el inicio de una larga década en donde gobernaron los Estados Unidos las mafias que traficaban el alcohol clandestinamente y que con sus ganancias compraron gobiernos, policías y jueces; ciudades enteras de la unión americana, como la triste y convulsionada Chicago de Al Capone.

Muy tarde, muchos muertos después, luego de miles de huérfanos y viudas, de familias hechas pedazos, el gobierno se dio cuenta de que había tomado una mala decisión aquel 16 de enero de 1920, Wilson era un mojigato y uno de los grandes valores de la sociedad estadounidense era la libertad, incluida la de ponerse hasta atrás a punta de jaiboles.

¿Cuánto tiempo tardarán los gobiernos del mundo en reconocer la similitud de esta experiencia con el problema de las drogas que vivimos hoy?


Ilustrac¡ón: detalle de Los bebedores de Daumier.


viernes, 15 de enero de 2010

De chile y de manteca


Nunca mejor dicha esta expresión para referirse a un gremio multicolor y ciertamente dispar como el de los compositores mexicanos, que hoy celebran. Los tenemos de todos los olores y sabores, desde los melancólicos irredentos, pasando por los cursis, los alegres, los entequilados, rancheros, citadinos, pediátricos hasta los solemnes.

El Siglo XX es, sin duda, el siglo de los compositores mexicanos, los hubo en grandes cantidades y calidades. ¿Que cuál es el compositor más importante de México? Aquí hay tantas versiones como compositores o, al menos, géneros musicales. Por un lado están los boleristas: Lara, Arcaraz, Curiel, el clan de los Domínguez; por otro lado, los rancheros: José Alfredo, Cervantes, Esperón, Cuco Sánchez, Federico Méndez; los baladescos, Manzanero y Juanga entre lo muy destacado. Los cultos Chávez, Revueltas y Moncayo; el infantil Cri Cri; los satíricos Chava Flores, Tin Tan, Piporro. En fin, en México por compositores no paramos, si se trata de elegir nos somete a un delicado y extenso problema de preselección.

Como en gustos se rompen géneros, cada quien tiene su corazoncito y, aunque me revele como cursi irredento, debo reconocer que mi compositor favorito es el inefable (o mejor: infalible) Flaco de Oro.


jueves, 14 de enero de 2010

Chava el chiva


Esta no es una mañanita común y corriente; no es cualquier mañanita; no es ni muy rica, ni muy pobre. Se trata de mi amigo Nacho... Un pobre gato viudo que se curaba de sus enfermedades con los pulques de Apan... ¡humm! Lo hubieran conocido ustedes, yo lo conocí en el bautizo de Cheto. ¿Cómo que cuál Cheto? El pariente del pobre-Tom, al que vimos en aquella tertulia en la que hubo dos horas de balazos; sí, hombre, en la que el pobre-Tom perdió la decencia con aquella interesada.

No, definitivamente no es cualquier mañanita, porque un día frío como hoy de 1920, salió el sol en mi viejo Tepito, en plena capirucha. Nació un bebé que no lloró, antes bien, llenó de albures a los doctores. ¿Qué es esto? gritaron al unísono. Que ha nacido Chava. ¿Qué cuál Chava? Chava Flores, hombre, quién más... el fanático de las chivas del Guadalajara que era amigo del hermano de un señor, que no vino a la fiesta.


Chava Flores, que nació este día de 1919 para ser el mejor trovador y cronista de los mexicanos.



miércoles, 13 de enero de 2010

Bienvenida


Norma, preciosa, bienvenida al blog, gracias por apuntarte entre los seguidores. Sólo espero no decepcionarte demasiado.

Nalgador


“Este grafococo tierno
lleva, por signo fatal,
como apellido paterno
la profesión maternal”


Sardónicamente llamado Nalgador Sobo, la mañana de hoy de 1974, a los 70 años de edad, murió el poeta, ensayista, maestro, funcionario de más de una generación, Salvador Novo. Hombre polémico por su audaz forma de vivir y pensar, Novo escribió libros como La Grandeza Mexicana, El Joven, Nuevo Amor, La Culta Dama, La Casta, Sátira y A Ocho Columnas. El también cronista de la ciudad de México fue una de las personalidades más polémicas, temibles y venenosas del siglo XX, así que se ganó a pulso su esponjoso apodo; sus amigos recibieron odas no siempre elegantes, pero sus enemigos se ganaron algunos de los versos prosaicos más hirientes de la literatura, como se deja ver en ese verso dedicado a uno de sus muchos enemigos: Luis Spota. Todos sabían que Novo era calvo, que odiaba ser calvo, lo que casi nadie sabía es qué cosa había debajo de su famoso peluquín.



martes, 12 de enero de 2010

No nos hagamos guajes


De tarde en tarde, los encargados de sondear la opinión pública mexicana a través de encuestas han preguntado a los mexicanos sobre su relación con los Estados Unidos, su grado de interés, sus afinidades y diferencias.

En Oficio mexicano Roger Bartra analiza una encuesta que apareció en la revista Este País en abril de 1991 con resultados reveladores: 59% de los mexicanos estaría de acuerdo en integrarse a los Estados Unidos para formar un solo país, si ello significara una mejor calidad de vida. “Otros resultados de la encuesta publicados en la revista –escribe Bartra- confirmaban el debilitamiento del tradicional nacionalismo mexicano”. (pp:93) Tres lustros después de aquella encuesta, Carlos Puig cita otra del diario Milenio que revela que cuatro de cada diez mexicanos se mudarían a vivir y trabajar en Estados Unidos si tuvieran la oportunidad; dos de diez lo están pensando seriamente, aun sin documentos.

El estudio fue presentado por Pew Hispanic Center el 16 de agosto del 2005. El 35% de egresados universitarios dijeron que estarían dispuestos a irse si tuvieran manera; 14% dijo que se iría aún sin documentos. El 50% de los encuestados afirmó que si hubiera un programa de trabajo temporal tomarían la oportunidad. Dice Puig: “Es un golpe a la idea inercial de que los mexicanos somos re´mexicanos, anti gringos, re´nacionalistas. (En realidad sólo) desean sobrevivir, y si se puede, vivir tranquilos, comer bien, vestirse decentemente y proveer para su familia. El lugar, en el largo aliento, sale sobrando”. (Carlos Puig, Milenio Diario 20-Ago-05)

Ahora la revista Nexos hace lo propio en una encuesta encargada a la empresa Mitofsky bajo la interrogante: ¿Qué país queremos ser? Que revela un resultado parecido: 30.6% elige a Estados Unidos como un modelo de país más deseable para los mexicanos, aunque un 33.7 decide que a ninguno. No quisiera que México se pareciera a ningún país. ¿Por qué?, es la siguiente pregunta. La lista de respuestas la encabezan tres premisas: economía, empleos y gobierno (48.7% por los tres). Estados Unidos encabeza también las respuestas a la pregunta de ¿a qué país no le gustaría que se pareciera México?, con un 13.7%, pero el 27.2% respondió de nuevo que a ninguno.

No me satisface la pregunta de Nexos en nuestras circunstancias, es ambigua, porque a diferencia del resto del mundo, los Estados Unidos es un país bastante conocido para los mexicanos, y el famoso sueño –se sabe en este país- consiste básicamente en ir a deslomarse al otro lado por unos buenos dólares. El 10% de nosotros está allá y sus ingresos representan la segunda entrada de divisas a este gran y desaprovechado país. Es decir, es de esperarse que los mexicanos no quieran parecerse a los Estados Unidos porque saben que no es posible parecerse, pues lo conocen más o menos bien. Respetan y admiran sus logros sociales y políticos; ansían que México tuviera un desarrollo económico, no parecido al de Estados Unidos, sino con el rumbo democrático de los Estados Unidos, donde la corrupción ha sido realmente combatida y los gobiernos están obligados a cumplir su tarea de atender a la ciudadanía. Si conociéramos el caso de los países escandinavos no dudaríamos en ponerlos también como modelos de desarrollo. Pero tanto como parecerse, es otra cuestión. El país que queremos ser no tiene otro nombre que el de México, pero quisiéramos que nuestro país tuviera un gobierno que decidiera jugársela con el famoso pueblo, que los políticos no se comportaran como aves rapaces y nuestras leyes se aplicaran para ponerlos en orden; que hubiera una contraloría con jurisdicción en todos los niveles de gobierno que evitara el saqueo que a todas luces vemos hoy, vimos ayer y algunos vimos desde antier. Nos encantaría que los senadores y diputados escucharan nuestra opinión, que se nos preguntaraa a los mexicanos a través del plebiscito si estaríamos dispuestos a comprometernos para que, juntos, pudiéramos resolver un problema real en cualquier gobierno de la historia que es su natural peculio, los impuestos que casi nadie paga, que va junto con pegado a nuestra dependencia financiera con un recurso natural que ya se agota y cuya discusión no tiene sentido posponer. Eso hubiera sido útil que la encuesta de Nexos buscara dilucidar, no comparándonos con países que para empezar la mayoría ni siquiera conoce, sino comparar nuestra situación con los anhelos colectivos que el IFE ha sido incapaz de revelar a través de las urnas, situaciones que vemos –tampoco estamos ciegos- que operan en otros países, sí, como los Estados Unidos, donde la ley se aplica con un grado muchísimo menor de impunidad.

En otras palabras, no nos hagamos guajes: sabemos que país queremos ser: México, con todas sus contradicciones y bellezas; su riqueza, pero no su pobreza, porque sabemos también que ésta se deriva de la corrupción y el jineteo, de la inequidad, la ineficiencia, la falta de acción, de pasión de parte de quienes presuntamente elegimos para que se encarguen de esas cosas. Es evidente que no pueden darnos la administración para tener el país que queremos, que no merecen esos sueldos que estaríamos dispuestos a tolerar si fueran eficaces, patriotas. Es evidente que no pueden darnos ese país.

Creo, sin embargo, que dado nuestro “avance democrático”, nada será posible hacer en México sin el convencimiento de la clase política de que está en sus manos modificar las cosas, de que los cambios que demanda nuestra situación tiene que ver con ellos, los partidos, y que será desde adentro de ellos como puedan suceder los urgentes cambios que imploramos: reforma hacendaria que nos permita pagar impuestos –una vez que tengamos trabajo, claro está-, reforma democrática que garantice transparencia; reforma económica que le de sentido y uso racional a nuestros recursos naturales, que abata los monopolios, que garantice una mejor distribución de la riqueza. Es el camino corto que nos urge a los mexicanos para ser el país que quisiéramos ser. El camino largo –y caro y penoso- es la violencia social.



lunes, 11 de enero de 2010

55


Sergei:

Una falla mecánica a mi estupidez numerológica me permite recordar que hoy es tu cumpleaños: felicidades. Es cierto que 55 años no es un número emblemático, fatídico ni de la suerte. Tampoco numera o exhibe una posición sexual (podrías experimentar, nomás cuida de no romperte el cuello), un grupo de países no alineados, el nombre de un bar, de alguna película de Fellini, o el imposible día de un mes imposible de ningún calendario. No, 55 no es sino el medio tramo de una década que te echa de cabeza a la mentada vejes; un punto que ya no es frontera sino territorio nacional de la adultez plena, de edad madura, de una vida ya muy vivida; de una carretera en donde se han pagado casi todos los peajes. Ve por tu retrovisor ¿ves un güey que viene a toda velocidad detrás de tí? Soy yo.

Después de romperme la cabeza con el 55 he llegado a conclusiones más o menos sensatas: en efecto no designan ningún hito de la numerología humana, pero son simpáticos, son prácticos, sencillos, simples, como la edad misma. Y además -esto se me acaba de ocurrir en un alarde de brillantez-, sumados, designan diez. Pues bien: tienes un diez. Felicidades por tu diez.

Ahora sólo espero que sí sean 55, pues 54 echarían por la borda toda mi elaborada especulación (además de que este número sí designa una posición sexual que te recomiendo, nomás tengan cuidado, no se vayan a romper el cuello), en fin. Un abrazo.

(…)

Gracias Polk. Sí, vale tal elaboración para los 55, que pasan hoy. Lo malo de la imagen del retrovisor es que lleva a plantar el parabrisas en un frente que ya no se arroja tan rápido como el paisaje de los años idos. Eso sí, el güey que observo detrás definitivamente tiene que abrir la ruta, Polank, eres una maravilla, y vuelves muy placentero este pasaje por la posición 55. Y aquí confieso la ignorancia en torno al 54: si él es el 5, el barrigón tendrá problemas de alcance; si ella el 4, su trasero parece pequeño pero lucidor, y doblemente difícil para la barriga plena que lo acomete; claro que también el 4 parece masculino, con una clara erección que carga al vacío; el 5 para ella sienta bien para una mexicanísima petacona de deslucidas pencas mamatorias. Qué hacer si no esperar que el guionista explique sus elevados propósitos aritméticos. Y mandar un abrazo viejo.


¿Pecó Pico?


En el tristemente célebre año de 1847, los mexicanos en los territorios del norte profundo intentaron defender lo indefendible ante la poderosa carga de los yanquis que ambicionaban esas tierras.

Este día se rinde el comandante y gobernador de la Alta California, Andrés Pico, y firma el Tratado de Cahuenga, con el que entrega el mando al general yanqui John Fremont.

Hombre a cual más de práctico, Pico toma una decisión poco nacionalista pero muy prometedora en las nuevas circunstancias de su terruño: se hace estadounidense, aprende a hablar inglés y dos años después alcanza un escaño como senador, ahora del flamante estado de California. Antes de mandar a Pico a la picota, reflexiona un momento ¿tú qué habrías hecho en su lugar?



domingo, 10 de enero de 2010

Días de violencia


Puede uno omitir estos datos de su vida. Yo lo hago con frecuencia, pues con la misma frecuencia aparecen en los diarios y noticiarios de nuestro infortunado país: 10 muertos en Juárez, 9 en Guerrero; otra balacera en Michoacán. Números fríos que procuro no humanizar para no caer en el más completo desaliento. Confieso que a veces reviso los nombres de los ajusticiados chihuahuenses en un morboso ejercicio de reconocer algún nombre, algún apellido que me lleve a entristecerme aún más. Aunque sé que es inútil. Los bebés que nacieron el año en que abandoné mi estado natal cumplen 32 años, y la mayoría de los muertos son menores a esa edad, imposible reconocerlos, pues nunca tuve oportunidad de conocerlos.

No quiero que sea este el tema de este blog y no lo es, pero es imposible sustraerse al asesinato de 69 personas en las últimas 24 horas; el feliz número sexual es ahora noticia de decesos de jóvenes que por algún error de cálculo terminaron al servicio de cárteles o de simples tienditas de narcomenudeo que ofendieron los intereses de quienes sobreviven a todas las matanzas. Al explorar la herida con el dedo es imposible no pensar en las 69 familias que hoy velan a sus jóvenes muertos, decenas de hijos huérfanos, de esposas viudas; cientos de hermanos, miles de familiares que, de un plumazo –plomazo, para mayor propiedad- han sido desprovistos de su familiar. Hecho contundente como el calvario de las 283 familias que en estos primeros días del año han pasado ya por lo mismo.

Nadie más inapropiado que yo para plantear salidas a esta prolongada tragedia, pero me niego a considerar a esos jóvenes mexicanos como los sicarios y asesinos que muchos medios de comunicación insisten en hacérnoslos ver; no, para mí son jóvenes desempleados, víctimas del engaño del cielo en la tierra, de los narcocorridos, de la cerrazón de un sistema inmoral que los arrincona y los encarrila como reses del rastro. Lo único que me queda claro de la guerra del gobierno contra el narcotráfico es la enorme suma de muertos que ha costado. Los muertos nuestros de cada día.

Fotografía: Detalle de una foto de El Universal

sábado, 9 de enero de 2010

De nostalgias


La nostalgia es una especie de dolor que asalta a los seres que han perdido algo. En México es común ver a los abuelos nostálgicos con canciones de las hermanas Águila o Consuelito Velázquez, pero ¿en qué momento se empieza a ser nostálgico?

La música de Joan Baez nos conduce a una época relativamente cercana que trae a colación una cantidad de recuerdos en quienes ahora rondan los sesenta. Es posible que al escuchar esas viejas tonadas de protesta sea inevitable recordar la guerra de Vietnam, el cinismo de Díaz Ordaz y las prolongadas discusiones de café, con Marx o Gramsci bajo el brazo.

Marilyn Monroe ha muerto, Argelia se independiza, Castro, Nikita y Kennedy nos ponen al borde de una guerra nuclear. Valentina Tereshkova se convierte en la primera mujer cosmonauta y Martin Luther King, frente a 200 mil personas, dice en voz alta el sueño de millones de seres.

Cuando se recuerdan tantas cosas con una canción es inevitable pensar que uno, también, comienza a ser un... nostálgico. Joan Baez nace un 9 de enero de 1941 en los Estados Unidos y, que se sepa, goza hoy de buena salud a sus 69 años.



viernes, 8 de enero de 2010

El otro Carlos


No había forma de ser imparcial con Carlos Monzón, a quien admirábamos por haber vencido al campeón italiano Nino Benvenuti, pero a quien no podíamos perdonarle el haber humillado a nuestro Manquilla Nápoles (1974), a quien hizo literalmente mantequilla en unos cuantos rounds. Era una bestia, usaba zancos en los brazos, pegaba como marro, no tenía cara de boxeador, ni las orejas de coliflor. ¿Quién era?, un espigado boxeador argentino de la más baja ralea que alcanzó la más alta ralea: Carlos Monzón, campeón indiscutible de los pesos medianos que por medio de sus puños hizo fortuna, fama y también desventura.

Con sólo 3 derrotas en 102 peleas, con 59 por KO y 14 defensas de su título, Carlos Monzón se retiró de los cuadriláteros e inició una azarosa vida que combinaba la más alta vulgaridad con la fama, el alcohol y el dinero. En una lamentable discusión con su esposa, una actriz de televisión, termina asesinándola, por lo que purga condena en la cárcel de Buenos Aires.

Libre los fines de semana por buena conducta, a 14 meses de su liberación total, la madrugada de un día como hoy de 1995, a toda velocidad, Carlos Monzón muere al estrellar su automóvil contra un árbol, una pared o una curva en el camino a Santa Fe, qué importa. Tenía mi edad, ¡un pibe, ché!


jueves, 7 de enero de 2010

¿Rulfo?


A la edad de 69 años murió un día como hoy de 1986 probablemente el más grande escritor mexicano de todos los tiempos: Juan Nepomuceno Carlos Pérez Rulfo Vizcaíno, frustrado por su largo silencio, nacido en Apulco, Jalisco, en 1917.

El intrincado ramaje ideológico del campesino mexicano, sus creencias y su devenir cotidiano cargado de carencias, son los elementos que Juan Rulfo toma para su lacónica, pero majestuosa obra, compuesta por dos pequeños libros: Pedro Páramo y El Llano en Llamas.

Estuve a solas con Juan Rulfo en una agencia de VW de la Av. Revolución en la ciudad de México por ahí de 1980. Cada uno esperaba su respectivo vehículo, cada quien con su respectiva impaciencia. Lo reconocí de inmediato aunque me atreví a confirmar su identidad hasta muchos minutos después. Había leído su obra, podría hablarle, pero ¿de qué? Además el hombre estaba enojado, su impaciencia era mucho más ansiosa que la mía, incluso se obstinaba en permanecer de pie, no obstante que la sala estaba llena de sillones. No recuerdo quién salió primero, no lo volví a ver, ni mucho menos estar a solas con él un día cualquiera de la semana. Nunca me torturó la idea de no haberle hablado, pues todavía hoy mis dudas prevalecen ¿qué podría haberle dicho? Por otro lado, existe la lejana posibilidad de que ese hombre no fuera Juan Rulfo, en cuyo caso mi recuerdo no tiene futuro. Y no se me ocurre que pueda haber algo más triste que un recuerdo sin futuro.



miércoles, 6 de enero de 2010

Ay, Melchor


En 1814, nace en Pateo, Michoacán, el autor de la controvertida pieza oratoria que todos conocemos como Epístola de Melchor Ocampo. Don Melchor tenía una progresista visión de la mujer, adelantada a su época, en un siglo -el XIX-, donde la mujer mexicana era poco menos que un cero a la izquierda. Lo inverosímil, lo paradójico, es que habiendo adelantado tanto en el siglo XX (o dizque), la famosa epístola haya sobrevivido a los tiempos y leída indubitablemente en cada matrimonio, a pesar de la posición anacrónica, sexista, machista y conmovedoramente cursi de su mensaje, que retrata a la mujer como una hija perenne de los hombres. Inválida, que debe ser protegida y mantenida por el varón. Sí, sí, don Melchas.

Hago votos para que la Epístola de Melchor Ocampo sea una de las cosas que los mexicanos dejemos allá, en el pasado, donde debe estar. Y junto con ella, algunos atavismos que también es hora de cambiar, como las ridículas y momificadas ceremonias patrias donde se honra una ilusión que no tiene que ver con la realidad. Los políticos que las animan no respetan esa bandera que saludan con el rostro desencajado de pasión. Y la solemnidad con la que cantan el himno nacional es pura música de viento, pues no tienen nada que ver con sus acciones. O peor, con su falta de acción, su enanés, ausencia de miras, abandono, negligencia, su impune corrupción.


Gaspar


Eres el único tío que tuve (porque Mario era más un primo que un tío), por lo que sobra decir que eras mi tío favorito. Representabas el ideal de los tíos para un sobrino que disfrutó mucho de tus historias y recuerdos. ¿Te acuerdas? Te rodeabas de una docena de sobrinos y nos contabas historias de la familia, de la ciencia, de la naturaleza, de tu trabajo de ingeniero metalúrgico en Monclova. Hacíamos torneos de atletismo e intercambiábamos algunos lances de box. Nos mostraste un mundo que aquellos niños pueblerinos de los años sesenta no imaginábamos que existía. Para tu sorpresa recuerdo muchas de aquellas historias (en realidad yo soy el sorprendido), tu rostro oriental detrás de una cortina de humo, tus brazos musculosos, tus famosos codos de chupón de color casi negro. Tus carcajadas y tus bromas. Eras el tío por antonomasia. El tío que uno quisiera haber sido cuando tuvo la oportunidad. Gracias, Gaspar, por haber sido aquel tío.



martes, 5 de enero de 2010

El sueño de Iturbide


En 1822, con el propósito de averiguar después lo pertinente de la medida, pero buscando amarrar su independencia al lado de la nuestra, se anexan a México espontáneamente Guatemala, Honduras y Nicaragua inmersas en el sueño del imperio iturbidista.

El sueño duró muy poco tiempo, en rigor, apenas si fue una cabeceadita, un breve intervalo de sopor somnoliento que despertó en el ánimo de los centroamericanos una sola consigna: “salir inmediatamente de ahí”.

A casi dos siglos de distancia no es difícil pensar qué hubiera sido de esos tres estados nacionales largamente gobernados (¡brujo!) por el PRI, en sus nuevas circunstancias. Colom, del estado libre y soberano de Guatemala pertenecería al PAN, Porfirio Lobo de Honduras sería priísta (aunque el defenestrado Zelaya estaría coqueteando una candidatura con el PT) y Ortega, de Nicaragua, claramente, pertenecería al PRD.

Por eso, atinadamente, los antiguos gobiernos independizados de Centroamérica, aplicaron para sí una antigua sabiduría oriental: “preferible ser cabeza de ratón… que cola de león”. Y así les fue.


lunes, 4 de enero de 2010

De guerreros y sombras


En 1886 muere de viejo un hombre que se jugó la vida en incontables batallas, con los adversarios más diversos que llegaron por mar, que nacieron aquí o allá, que ya estaban antes de que llegara nadie: Ignacio Pesqueira.

Pesqueira fue diputado y gobernador por dieciocho años en su estado natal, Sonora. Combatió en momentos diferentes a los conservadores, a los invasores franceses, a los imperialistas de Maximiliano, a los filibusteros que buscaban crear una república autónoma en su tierra y a los yaquis, que defendieron su tierra hasta casi la extinción.

Extraño destino a este tipo de guerreros que no dejaron su sangre, ni un brazo o una pierna en el campo de batalla, sino que, al vivir luego de tantas batallas, salieron victoriosos. Extraño que, como Nicolás Bravo, otro héroe de mil batallas, apenas se les mencione o, como Pesqueira, apenas se les conozca. Indica que los héroes destinados a ser héroes habrán de dejar el pellejo sobre el tapete de sus guerras, que los héroes vivos no impresionan a nadie; que al vivir, simplemente, dejan de ser héroes.

Este día Pesqueira muere de viejo en su hacienda de Bacanuchi, Sonora.



domingo, 3 de enero de 2010

Aída


Hoy, Aída, el origen, cumple 75 años.
Yo sé que no me entiendes, por más que te lo quiera explicar. No entiendes nada. Pero hay en tu rostro divagante experiencias que nos pertenecen y que no podemos obviar, porque las vivimos tú y yo. Antes de que te perdieras en el alzheimer vi tu vida y me construí la mía, o mejor, construí mi vida con la tuya, pues tú me enseñaste a ser el humano que soy. Yo he sido lo que tú fuiste. Y soy consciente de que no estoy en el grado de incomprensión en el que estás. No importa. Hablar de ti me lleva a toda esa cantidad de cosas que vi de ti. Cuando lloraste en la parroquia, cuando andabas de negro. Cuando defendiste un acto de justicia, alzaste la voz, participaste en la escena del mundo, yo te vi. He hecho lo mismo, como tú me enseñaste. Te recuerdo enorme en algunos escenarios de la escuela primaria. Eras enorme y yo era muy pequeño. Ahora todo ha cambiado.

Primer chaleco antibalas


Desestimado oficialmente en la historia de México, el Pípila sobrevive gracias a su imagen epopéyica de modelo para escultores profesionales y en ciernes; sin embargo, hay datos que identifican a Juan José Martínez, quien nació un día como hoy de 1782 en San Miguel de Allende, Guanajuato, como la persona que aporta humanidad en carne y hueso a este guerrero que, con una lápida en la espalda para evitar las balas españolas, se fue acercando, se fue acercando, hasta que llegó e incendió la puerta de la Alhóndiga de Granaditas, que momentos después permitió el triunfo a los insurgentes en esa batalla. ¿No es el Pípila uno de los héroes más recordados de la escuela primaria? Bueno, era. Como sea es, quizás, el inventor del moderno chaleco antibalas. Y eso tampoco se lo reconoce nadie.



sábado, 2 de enero de 2010

Vientos







Xólotl Moranovich, es un honor tu presencia como seguidor del blog, muchas gracias.

Luz que mueve


Al inicio del siglo XX, el censo general de población mexicana arroja una cifra de trece millones quinientos cuarenta y cinco mil cuatrocientos sesenta y dos habitantes en el país, la mayoría de ellos campesinos. Sin embargo, la prometida modernidad que nos llegaba de Europa y los Estados Unidos era una realidad, era cosa de dejarla entrar, como había ocurrido con los teléfonos y los cables subacuáticos.

Este día de 1900 los habitantes de la ciudad de México se quedaron atónitos al ver que los tranvías eléctricos comenzaban a funcionar bajo la operación de una empresa inglesa, aunque no acababan de comprender de bien a bien cómo funcionaban, cuál era la fuerza motriz que los movía. Pasaría algún tiempo para acabar de sustituir los tranvías de mulas, pero marcó el inicio de un siglo de movilización masiva a través de la electricidad.



viernes, 1 de enero de 2010

Sospechosismo


En 1584, con motivo del Año Nuevo, el fraile Martín Durán pronuncia un discurso a favor de los habitantes originarios mexicanos que crea severas sospechas en la Inquisición. ¿Era un llamado a la rebelión? Por aquello de las dudas, se ordena que Durán sea quemado vivo en la plaza de Santo Domingo.



Nuevo ciclo


Cuántas frases célebres y no tan célebres conocemos respecto al pasado, al valor de su comprensión, a las enseñanzas de la experiencia. La mayoría de las frases son célebres porque seguramente son ciertas. El pasado nos enseña, nos orienta, nos protege de la estupidez humana tan pródiga en esta apertura de milenio. Guerras inútiles y muchas de ellas perdidas de antemano; invasiones cínicas que buscan convencernos de su buena voluntad asesinando inocentes; el hambre ancestral frente a la abundancia ofensiva. Cuánto falta para que los humanos entiendan su delicada esencia existencial, el privilegio infinito de poseer inteligencias y virtudes.

Este blog seguirá bordando en la memoria, en los recuerdos simples del autor o de la gente que lo circunda. Es necesario aferrarse a algo tan valioso como la memoria para que la grosera realidad política y económica que nos oprime no se imponga como la única realidad en nuestras necesitadas vidas. Vamos, a punta de memoria podremos hacer chirriar los agudos colmillos de la crisis, de las crisis, pues este nuevo año nos presenta un panorama en donde las memorias oficiales y las memorias individuales de los mexicanos tendrán que enfrentarse en sus dos versiones posibles: la memoria como liturgia de políticos y comensales que buscarán refrendar sus privilegios, y la memoria colectiva de un pueblo que quiere recordar no sólo para el simple oficio de aplaudir, honrar y conmemorar, sino recordar también para votar, para cambiar, para recobrar.