(La historia que traicionó Cronos: La muerte del beatle George Harrison el 30 de Noviembre del 2001 le cierra toda posibilidad a la World Music Corporation para crear otra figura cibernética. Entérate de los detalles que condujeron a ese imperativo.)
DOBLE FANTASIA: LENNON VIVE
El escenario es una estación de radio. Están a punto de transmitir una feliz invención en
la que muy pocos van a reparar, al fin que sólo es un programa de radio. Un pretexto
para escuchar a Lennon y creer, momentánea aunque firmemente, en que lo mejor de la vida está en los sueños que creamos, las historias que nos contamos, las fantasías que nos acompañan en el camino y en la soledad.
Son las seis de la tarde.
- Buenas tardes, amigos, los saludamos Gerardo y Ana en este día tan especial para
alimentar la ubicua lennonmanía.
- Así es -dice Gerardo-, el día esperado para el gran concierto homenaje al ex-beatle
John Lennon, de nuevo en compañía de George, Ringo y su archirival, y también archiamigo, Paul McCartney.
- En unos momentos más -sigue Ana-, haremos el enlace hasta Lennon City donde se encuentra nuestro enviado Melchor Morán, para transmitirnos, en vivo y en estéreo, los
pormenores del concierto homenaje al inolvidable John Lennon. ¡Hacemos el enlace…!
(Ruidos eléctricos. Música de Lennon.)
- Espérame un poco, Ana, antes de hacer comunicación con Melchor desde Lennon City, les platicaremos un poco de la historia que ha dado como resultado este magnífico evento.
(Producción: es inminente que ustedes imaginen un fondo musical. El tema elegido es "Double Fantasy" y desde la entrada del programa fondea entre un parlamento y otro de los locutores.)
- Como algunos de ustedes sabrán -prosigue Ana-, en 1994, una compañía californiana,
The Cibernetic Corporation, creó un ser artificial poseedor de un cerebro humano,
o casi humano, programado por una computadora, con las cualidades, gestos
y actitudes de un hombre de la historia muerto, que se quisiera recrear.
- ¿Un especie de clonación?
- Sí, mira, se trata de un hombre de carne y hueso, pero con un cerebro programado.
No es precisamente humano, pues las leyes de California no lo permiten, pero como
dices, casi lo es. Esto fue posible gracias a la tecnología que el hombre ha
desarrollado.
- Y la mujer, querido... -interrumpe Ana.
- Claro. Un ser, artificial, por supuesto, pero hecho a base de cromosomas humanos.
Un hombre biónico que hoy va a cumplir el papel de John Lennon en este concierto
extraordinario que reúne a los otros tres Beatles.
Puente musical
- Pero ya te adelantaste mucho, Gerardo, estábamos apenas en la historia. El 10 de mayo de 1994, el Departamento de Industria de los Estados Unidos informó que los derechos
sobre el ser artificial fabricado en Los Ángeles, pertenecían a una, hasta el
momento desconocida, Music World Corporation, que hoy ha organizado el
evento.
(La señal es interrumpida por un ruido eléctrico.)
- Estamos checando ya el control remoto con Lennon City, en el desierto de Arizona,
para que en unos momentos más nos conectemos en vivo y en directo con Melchor Morán, que está en el concierto homenaje a Lennon, y que 105 FM transmitirá en sonido estéreo. Mientras tanto, les seguiremos contando rápidamente los antecedentes del concierto. Ana...
- Así es, Gerardo, como dijiste, en un lugar junto al Lago Roosevelt, en pleno desierto
de Arizona, ha sido creada una ciudad enorme que ahora lleva el nombre de Lennon City.
- Es un proyecto impresionante, Ana, amigos del público, Lennon City tiene una orientación mercadotécnica similar a Disneylandia. Melchor nos ha venido platicando que se construyeron juegos mecánicos y fantasías con Submarino Amarillo, Help!, El Sargento Pimienta. Y si ustedes saben lo que es Disneylandia, pueden darse una idea de lo que se está viviendo en estos momentos en Lennon City.
- Es que, imagínate, un lugar donde te subes a un submarino amarillo y tienes las
vivencias de la película.
- Te persiguen los hombres azules y tú tienes muchas ganas de huir. ¿Te acuerdas de los
hoyos móviles?
- Claro. Además nos cuentan que la muy nombrada realidad virtual, un juego de
video que te da sensaciones con imagen, está aplicándose en muchos de los sitios
de Lennon City. Las letras de sus canciones las puedes vivir a través de la máquina.
¿Te acuerdas cuando estuvieron tres días acostados en una cama rodeados de
periodistas?
- Sí, era un acto por la paz.
- Me platicó Melchor que estuvo en ese cuarto gracias a la Realidad virtual. Ahí estuvo
él, incluso preguntó algo a John Lennon.
- A la mejor es el mismo Lennon que usarán esta tarde para el concierto.
- Tengo entendido que no, era un juego de realidad virtual. John Lennon acaba de ser
activado, ahorita, en Los Angeles, California, y en este momento debe estar
llegando a Lennon City. Ojalá no se tarden tanto en contactar a Melchor.
Se oye un lejano rumor musical y multitudinario.
- Te quedaste pensativo, Gerardo -agrega Ana con tristeza-.
- Es que... imagino que con esta máquina la gente podrá tocar, sentir de manera directa
a John Lennon, aunque por supuesto sea una fantasía. Otro de los datos impresionantes
del concierto de hoy, Ana, es la asistencia. Se esperan... ¡imagínate! dos millones
de personas en el homenaje. Así que las instalaciones de Lennon City son igualmente
suntuosas, enormes, adecuadas para recibir esa cantidad de visitantes.
- Claro, hay decenas de hoteles, un aeropuerto internacional para aviones de esos enormes, centros nocturnos por toda la ciudad, casinos, además de los juegos mecánicos que mencionamos.
- Que no son como las ferias de acá, por supuesto.
- Por supuesto.
- Melchor nos informó que el replicante de Lennon será instalado en un lujoso espacio
donde se firmarán discos y autógrafos al por mayor, pues, como hombre biónico que es, no se cansará.
- Bueno, eso era lo que se proponía la Music World Corporation, Gerardo, pero ahora
el replicante va a tener que ser desactivado después del concierto, pues Yoko Ono, la
viuda de John Lennon, levantó una demanda contra la Corporación, alegando que el
homenaje que hoy transmitiremos, ofendía la memoria de John, y que debía ser suspendido.
- Qué lástima, a mi me hubiera gustado conocer a John. Esa Yoko siempre metiéndose en medio ¿no crees?
- No, pues imagínate a la familia de John, presenciando "forever" un monigote que
firma autógrafos a toda velocidad y hace payasadas para divertir a la gente... Es
muy humillante ¿no?
- Tienes razón. La cosa es que la Corte Federal de los Estados Unidos dictaminó en
un difícil proceso que los homenajes, en una sociedad libre, no podían ser
prohibidos...
- ¡Y mucho menos los negocios...!
- Por supuesto, y más tratándose de un negocio de este tamaño. Por lo tanto, el
concierto se llevaría a cabo en la fecha prevista, es decir hoy, 8 de diciembre.
- Sin embargo, Yoko Ono logró ganar la desactivación del robot, pues un Lennon
biónico haciendo gracias todo el día sí fue una imagen que las autoridades
consideraron ofensiva. Y lo van a desactivar. Los restos de Lennon serán
depositados en un mausoleo enorme que fue construido ex-profeso, para que los
turistas de todo el mundo puedan ir a visitarlo. O sea que sí lo podrás ver el
día que vayas a Lennon City.
- Pero dormido, qué chiste. Va a ser como la momia de Lenin en el Kremlin.
- Sí, sólo que ésta no será una momia, sino "un ser de carne y hueso, con cerebro
desactivado, en sueño perenne..."
- ¡Guau! te pusiste muy poética, Ana.
- Estaba leyendo las frases de la propaganda. Y así se estará hasta que lo vuelvan a
despertar. ¡Qué increíble! Todavía no acabo de asimilar todo lo que significa esta
locura.
(Hay señales de comunicación. Una multitud aparece súbitamente y se corta pronto.)
- Mira, en estos momentos, nuestros técnicos nos informan que comenzamos a tener
comunicación con Lennon City. Nos enlazamos con Melchor Morán, que se encuentra allá, para traernos el gran concierto homenaje a John Lennon, con Ringo, Paul y George, ya maduritos, y un Lennon artificial con inteligencia programada.
El enlace ocurre en medio de una multitud de ruidos mezclados. La voz de Melchor, aunque clara, llega con los vicios propios de una transmisión telefónica. Sin embargo tiene que gritar un poco, pues el fondo multitudinario lo invade por oleadas,
- Un saludo a todo el público mexicano desde esta novísima ciudad del desierto de
Arizona, donde se respira un aire de fiesta y todo huele a inauguración. Todo es nuevo y reluciente: "el más grande proyecto jamás realizado para un homenaje", coinciden en
afirmar los grandes periódicos y medios de comunicación.
(La multitud impide escuchar a Melchor, una música fondea las pausas que por alguna razón Melchor se ve precisado a hacer.)
- Construyeron un enorme aeropuerto, más de cien hoteles de toda clase de estrellas y
la banda se ha descolgado de todos los confines del mundo. Y de todo el mundo hay
reservaciones, según nos comentaba hoy el encargado del hotel donde se hospeda el
equipo de 105 FM.
La música de Lennon.
- Los organizadores calculan una asistencia de entre uno y medio y dos millones de
asistentes, cifra que hoy podemos constatar en carne propia. Aquí en el aeropuerto no
cabe un alfiler más. No sé si seremos dos millones, pero hay gente por todos lados;
en los juegos mecánicos, que están maravillosos, en los hoteles y restaurantes.
(Esa enorme multitud detrás del micrófono de Melchor.)
- El Lago Roosevelt luce increíble, invadido de gente y miles de lanchitas de todo tipo,
donde mucha gente ha pasado los días tomando cerveza y éxtasis bajo el desértico sol,
esperando la hora del concierto, que por fin ha llegado. En la mañana me tocó ver
pasar muchos convoyes que traían a los famosos. Autocars que no se imaginan.
Verdaderos palacetes rodantes como el búnker móvil de Madonna que ayer causó
enorme expectación por la Avenida McCartney, o la llegada de Michael Jackson. Son muchas las personalidades que se han dado cita para ver nuevamente a Los Beatles. Las han acomodado en unos enormes y padrísimos cuartos flotantes, algunos muy elegantes, que albergarán a las grandes figuras aquí reunidas. Algunos de éstos hoteles flotantes vuelan muy alto. Y flotan como globos aerostáticos sobre la enorme masa de gente que estamos acá abajo.
(Se escucha una música sublime, flotante.)
- Pero ahorita no hay sorpresa que supere la de ver en plena década de los noventas
reunidos a Los Beatles, con Lennon y todo. Claro, sólo falta que llegue, y que el ser
artificial se parezca realmente al John Lennon original. Y en eso estamos, aquí en
el aeropuerto de Lennon City, en espera de que llegue el avión que lo transportará de
Los Ángeles. ¿Qué les parece si hacemos una pausa? ¿Me escuchan?
- Te escuchamos muy bien, Melchor.
- ¿Qué onda?
- Que te oímos muy bien ¿nos oyes tú?
(La multitud opaca como respuesta de Melchor. Se corta la transmisión.)
- En unos momentos retomaremos la comunicación con Lennon City -dice Gerardo-, mientras tanto, estamos tan ansiosos como ustedes de que este concierto dé inicio y se presente al ser artificial, replicante de John Lennon, que tocará con los otros tres Beatles. ¿Qué te pasa, Ana?
- Ay, Gerardo, yo estoy verdaderamente nerviosa y emocionada, porque, aunque una
sepa que no es Lennon, el sólo hecho de que salga un robot parecido a Lennon me
llena de incertidumbre y miedo sobre el futuro. ¿Qué será de la mortalidad y la
inmortalidad? porque finalmente los grandes hombres y mujeres van a morir, pero para
los pueblos del mundo, para quienes los amen, podrán ser revividos. ¿O cómo la ves
tú, Gerardo?
- Pues sí, algo así. La muerte no significará a partir de hoy más que el fin de una vida
determinada, equis. Te mueres tú y ahí muere. Pero para la gente que te sigue
podrás ser revivido y reactivado; por medio de una computadora te indicarán cómo eras, cómo te movías, cuáles eran tus fobias, y luego te van a soltar por el mundo, para
que hagas otra revolución.
- Bueno, como es el primer experimento lo van a desactivar después del concierto.
- Sí, gracias también a la demanda que les hizo Yoko Ono, pero leí en una revista de
chismes que los cubanos ya están planeando una réplica de Fidel Castro ¿te imaginas?
¡qué peligroso!
- Ojalá le implanten un cerebro más democrático.
- El riesgo es que pueden revivirse Hitlers, Pinochets…
- Ay, no, Gerardo. Ya no sigas. Me está dando miedo. Tal vez el ser humano no está
preparado para esto.
- En fin. Tenemos nuevamente a Melchor Morán en la línea, desde Lennon City, así que le mandamos la señal. O él nos la manda a nosotros.
(Los ruidos electrónicos y la lejana multitud.)
- Estamos a punto de que aparezca el avión que transporta al replicante de John Lennon
a esta ciudad. El aeropuerto está atiborrado, y la gente se mece en enormes
oleadas al compás de la canción "Imagine", que aquí se ha convertido en un virtual
himno al amor y la paz... y por supuesto a John Lennon.
(Se aprecia la multitud entonando la famosa canción.)
- El día de ayer, a la llegada de los tres Beatles vivos a Lennon City, un hombre salió
inesperadamente de la multitud y, a pesar de las enormes medidas de seguridad que se
han tomado, pudo herir en el hombro a Paul McCartney cuando descendía de su limusina. El responsable resultó ser un desconocido músico de jazz que afirmó ser hijo del cantante. Ahí estuve con los micrófonos de 105 FM y, con muchos esfuerzos, logré
entrevistar al representante de la Music World Corporation, a George Harrison y a
Ringo Starr. Esto fue lo que me dijeron...
(Se escucha el ambiente de un aeropuerto abarrotado. Melchor nada entre docenas de reporteros que chocan entre sí sus grabadoras, apuntando el micrófono hacia los Beatles que llegan rodeados de elementos de seguridad.)
- How is Paul?
- We haven`t could support the inversion of an artifficial Beatle more. By luck, Paul
is all right and now doesn`t want to declare anything.
- Ana, Gerardo, John Jonhson, vocero de la Music World Corporation afirma que no
hubieran podido soportar la inversión en un Beatle más. Le voy a preguntar si es
verdad que el agresor de Paul era su hijo. John, Is that true about his son?
- I would know relling you. In a so diverse life such as the musics like Paul zize
anything can happen... -el hombre comienza a reír- However of being a jazz black singer.
- Thank you, John. Por aquí por favor. Espere. Estoy intentando acercarme a donde se
encuentra detenido George Harrison, rodeado de periodistas. George, George, for
Mexico... John Johnson me contó que afortunadamente Paul está bien y por el
momento prefiere no declarar nada. Que en las diversas vidas de los músicos con la
talla de Paul puede suceder cualquier cosa George, George...! Escuchemos...
- I have get protected about this contry law and the hole world for not leaving
posibilities of a cibernetic reproduction of me.
- Wouldn`t you like to live a little more after you die?
- No. Anyway we return in a live being after death.
- Acaba de llegar también Ringo Star a donde nos encontramos rodeando a George. Trataré… de llegar hasta él para llevarles su voz a todos ustedes. (Melchor forcejea entre la gente mientras sigue su narración) Harrison nos contaba que se protegió legalmente en Estados Unidos para evitar ser reproducido cibernéticamente. Escuchemos a Ringo.
- Yes, I Would like to have a cibernetic reproduction of me... -ríe- but in life.
I`m going to ask for one of those, we will got a good friends.
- Ringo dice que a él sí le gustaría ser reproducido cibernéticamente, pero en vida.
Dice que ya ha investigado los procedimientos, que serían grandes amigos.
David Chapman, el asesino de Lennon, dijo en su celda de Nueva York que, de poder
hacerlo, lo volvería a matar. Envío micrófonos a México. ¿Gerardo? ¿Ana?
- Te escuchamos muy bien, Melchor, adelante.
- ¿Bueno...? Yo los escucho muy mal. Cortamos un momento.
(Se escucha un ruido eléctrico y el corte de Melchor. Sobreviene música de fondo.)
- Por lo visto está a punto de aterrizar el avión amarillo que transporta al "ente"
Lennon, a tantos años de su muerte.
(Continúa mañana… el Concierto)
DOBLE FANTASIA: LENNON VIVE
El escenario es una estación de radio. Están a punto de transmitir una feliz invención en
la que muy pocos van a reparar, al fin que sólo es un programa de radio. Un pretexto
para escuchar a Lennon y creer, momentánea aunque firmemente, en que lo mejor de la vida está en los sueños que creamos, las historias que nos contamos, las fantasías que nos acompañan en el camino y en la soledad.
Son las seis de la tarde.
- Buenas tardes, amigos, los saludamos Gerardo y Ana en este día tan especial para
alimentar la ubicua lennonmanía.
- Así es -dice Gerardo-, el día esperado para el gran concierto homenaje al ex-beatle
John Lennon, de nuevo en compañía de George, Ringo y su archirival, y también archiamigo, Paul McCartney.
- En unos momentos más -sigue Ana-, haremos el enlace hasta Lennon City donde se encuentra nuestro enviado Melchor Morán, para transmitirnos, en vivo y en estéreo, los
pormenores del concierto homenaje al inolvidable John Lennon. ¡Hacemos el enlace…!
(Ruidos eléctricos. Música de Lennon.)
- Espérame un poco, Ana, antes de hacer comunicación con Melchor desde Lennon City, les platicaremos un poco de la historia que ha dado como resultado este magnífico evento.
(Producción: es inminente que ustedes imaginen un fondo musical. El tema elegido es "Double Fantasy" y desde la entrada del programa fondea entre un parlamento y otro de los locutores.)
- Como algunos de ustedes sabrán -prosigue Ana-, en 1994, una compañía californiana,
The Cibernetic Corporation, creó un ser artificial poseedor de un cerebro humano,
o casi humano, programado por una computadora, con las cualidades, gestos
y actitudes de un hombre de la historia muerto, que se quisiera recrear.
- ¿Un especie de clonación?
- Sí, mira, se trata de un hombre de carne y hueso, pero con un cerebro programado.
No es precisamente humano, pues las leyes de California no lo permiten, pero como
dices, casi lo es. Esto fue posible gracias a la tecnología que el hombre ha
desarrollado.
- Y la mujer, querido... -interrumpe Ana.
- Claro. Un ser, artificial, por supuesto, pero hecho a base de cromosomas humanos.
Un hombre biónico que hoy va a cumplir el papel de John Lennon en este concierto
extraordinario que reúne a los otros tres Beatles.
Puente musical
- Pero ya te adelantaste mucho, Gerardo, estábamos apenas en la historia. El 10 de mayo de 1994, el Departamento de Industria de los Estados Unidos informó que los derechos
sobre el ser artificial fabricado en Los Ángeles, pertenecían a una, hasta el
momento desconocida, Music World Corporation, que hoy ha organizado el
evento.
(La señal es interrumpida por un ruido eléctrico.)
- Estamos checando ya el control remoto con Lennon City, en el desierto de Arizona,
para que en unos momentos más nos conectemos en vivo y en directo con Melchor Morán, que está en el concierto homenaje a Lennon, y que 105 FM transmitirá en sonido estéreo. Mientras tanto, les seguiremos contando rápidamente los antecedentes del concierto. Ana...
- Así es, Gerardo, como dijiste, en un lugar junto al Lago Roosevelt, en pleno desierto
de Arizona, ha sido creada una ciudad enorme que ahora lleva el nombre de Lennon City.
- Es un proyecto impresionante, Ana, amigos del público, Lennon City tiene una orientación mercadotécnica similar a Disneylandia. Melchor nos ha venido platicando que se construyeron juegos mecánicos y fantasías con Submarino Amarillo, Help!, El Sargento Pimienta. Y si ustedes saben lo que es Disneylandia, pueden darse una idea de lo que se está viviendo en estos momentos en Lennon City.
- Es que, imagínate, un lugar donde te subes a un submarino amarillo y tienes las
vivencias de la película.
- Te persiguen los hombres azules y tú tienes muchas ganas de huir. ¿Te acuerdas de los
hoyos móviles?
- Claro. Además nos cuentan que la muy nombrada realidad virtual, un juego de
video que te da sensaciones con imagen, está aplicándose en muchos de los sitios
de Lennon City. Las letras de sus canciones las puedes vivir a través de la máquina.
¿Te acuerdas cuando estuvieron tres días acostados en una cama rodeados de
periodistas?
- Sí, era un acto por la paz.
- Me platicó Melchor que estuvo en ese cuarto gracias a la Realidad virtual. Ahí estuvo
él, incluso preguntó algo a John Lennon.
- A la mejor es el mismo Lennon que usarán esta tarde para el concierto.
- Tengo entendido que no, era un juego de realidad virtual. John Lennon acaba de ser
activado, ahorita, en Los Angeles, California, y en este momento debe estar
llegando a Lennon City. Ojalá no se tarden tanto en contactar a Melchor.
Se oye un lejano rumor musical y multitudinario.
- Te quedaste pensativo, Gerardo -agrega Ana con tristeza-.
- Es que... imagino que con esta máquina la gente podrá tocar, sentir de manera directa
a John Lennon, aunque por supuesto sea una fantasía. Otro de los datos impresionantes
del concierto de hoy, Ana, es la asistencia. Se esperan... ¡imagínate! dos millones
de personas en el homenaje. Así que las instalaciones de Lennon City son igualmente
suntuosas, enormes, adecuadas para recibir esa cantidad de visitantes.
- Claro, hay decenas de hoteles, un aeropuerto internacional para aviones de esos enormes, centros nocturnos por toda la ciudad, casinos, además de los juegos mecánicos que mencionamos.
- Que no son como las ferias de acá, por supuesto.
- Por supuesto.
- Melchor nos informó que el replicante de Lennon será instalado en un lujoso espacio
donde se firmarán discos y autógrafos al por mayor, pues, como hombre biónico que es, no se cansará.
- Bueno, eso era lo que se proponía la Music World Corporation, Gerardo, pero ahora
el replicante va a tener que ser desactivado después del concierto, pues Yoko Ono, la
viuda de John Lennon, levantó una demanda contra la Corporación, alegando que el
homenaje que hoy transmitiremos, ofendía la memoria de John, y que debía ser suspendido.
- Qué lástima, a mi me hubiera gustado conocer a John. Esa Yoko siempre metiéndose en medio ¿no crees?
- No, pues imagínate a la familia de John, presenciando "forever" un monigote que
firma autógrafos a toda velocidad y hace payasadas para divertir a la gente... Es
muy humillante ¿no?
- Tienes razón. La cosa es que la Corte Federal de los Estados Unidos dictaminó en
un difícil proceso que los homenajes, en una sociedad libre, no podían ser
prohibidos...
- ¡Y mucho menos los negocios...!
- Por supuesto, y más tratándose de un negocio de este tamaño. Por lo tanto, el
concierto se llevaría a cabo en la fecha prevista, es decir hoy, 8 de diciembre.
- Sin embargo, Yoko Ono logró ganar la desactivación del robot, pues un Lennon
biónico haciendo gracias todo el día sí fue una imagen que las autoridades
consideraron ofensiva. Y lo van a desactivar. Los restos de Lennon serán
depositados en un mausoleo enorme que fue construido ex-profeso, para que los
turistas de todo el mundo puedan ir a visitarlo. O sea que sí lo podrás ver el
día que vayas a Lennon City.
- Pero dormido, qué chiste. Va a ser como la momia de Lenin en el Kremlin.
- Sí, sólo que ésta no será una momia, sino "un ser de carne y hueso, con cerebro
desactivado, en sueño perenne..."
- ¡Guau! te pusiste muy poética, Ana.
- Estaba leyendo las frases de la propaganda. Y así se estará hasta que lo vuelvan a
despertar. ¡Qué increíble! Todavía no acabo de asimilar todo lo que significa esta
locura.
(Hay señales de comunicación. Una multitud aparece súbitamente y se corta pronto.)
- Mira, en estos momentos, nuestros técnicos nos informan que comenzamos a tener
comunicación con Lennon City. Nos enlazamos con Melchor Morán, que se encuentra allá, para traernos el gran concierto homenaje a John Lennon, con Ringo, Paul y George, ya maduritos, y un Lennon artificial con inteligencia programada.
El enlace ocurre en medio de una multitud de ruidos mezclados. La voz de Melchor, aunque clara, llega con los vicios propios de una transmisión telefónica. Sin embargo tiene que gritar un poco, pues el fondo multitudinario lo invade por oleadas,
- Un saludo a todo el público mexicano desde esta novísima ciudad del desierto de
Arizona, donde se respira un aire de fiesta y todo huele a inauguración. Todo es nuevo y reluciente: "el más grande proyecto jamás realizado para un homenaje", coinciden en
afirmar los grandes periódicos y medios de comunicación.
(La multitud impide escuchar a Melchor, una música fondea las pausas que por alguna razón Melchor se ve precisado a hacer.)
- Construyeron un enorme aeropuerto, más de cien hoteles de toda clase de estrellas y
la banda se ha descolgado de todos los confines del mundo. Y de todo el mundo hay
reservaciones, según nos comentaba hoy el encargado del hotel donde se hospeda el
equipo de 105 FM.
La música de Lennon.
- Los organizadores calculan una asistencia de entre uno y medio y dos millones de
asistentes, cifra que hoy podemos constatar en carne propia. Aquí en el aeropuerto no
cabe un alfiler más. No sé si seremos dos millones, pero hay gente por todos lados;
en los juegos mecánicos, que están maravillosos, en los hoteles y restaurantes.
(Esa enorme multitud detrás del micrófono de Melchor.)
- El Lago Roosevelt luce increíble, invadido de gente y miles de lanchitas de todo tipo,
donde mucha gente ha pasado los días tomando cerveza y éxtasis bajo el desértico sol,
esperando la hora del concierto, que por fin ha llegado. En la mañana me tocó ver
pasar muchos convoyes que traían a los famosos. Autocars que no se imaginan.
Verdaderos palacetes rodantes como el búnker móvil de Madonna que ayer causó
enorme expectación por la Avenida McCartney, o la llegada de Michael Jackson. Son muchas las personalidades que se han dado cita para ver nuevamente a Los Beatles. Las han acomodado en unos enormes y padrísimos cuartos flotantes, algunos muy elegantes, que albergarán a las grandes figuras aquí reunidas. Algunos de éstos hoteles flotantes vuelan muy alto. Y flotan como globos aerostáticos sobre la enorme masa de gente que estamos acá abajo.
(Se escucha una música sublime, flotante.)
- Pero ahorita no hay sorpresa que supere la de ver en plena década de los noventas
reunidos a Los Beatles, con Lennon y todo. Claro, sólo falta que llegue, y que el ser
artificial se parezca realmente al John Lennon original. Y en eso estamos, aquí en
el aeropuerto de Lennon City, en espera de que llegue el avión que lo transportará de
Los Ángeles. ¿Qué les parece si hacemos una pausa? ¿Me escuchan?
- Te escuchamos muy bien, Melchor.
- ¿Qué onda?
- Que te oímos muy bien ¿nos oyes tú?
(La multitud opaca como respuesta de Melchor. Se corta la transmisión.)
- En unos momentos retomaremos la comunicación con Lennon City -dice Gerardo-, mientras tanto, estamos tan ansiosos como ustedes de que este concierto dé inicio y se presente al ser artificial, replicante de John Lennon, que tocará con los otros tres Beatles. ¿Qué te pasa, Ana?
- Ay, Gerardo, yo estoy verdaderamente nerviosa y emocionada, porque, aunque una
sepa que no es Lennon, el sólo hecho de que salga un robot parecido a Lennon me
llena de incertidumbre y miedo sobre el futuro. ¿Qué será de la mortalidad y la
inmortalidad? porque finalmente los grandes hombres y mujeres van a morir, pero para
los pueblos del mundo, para quienes los amen, podrán ser revividos. ¿O cómo la ves
tú, Gerardo?
- Pues sí, algo así. La muerte no significará a partir de hoy más que el fin de una vida
determinada, equis. Te mueres tú y ahí muere. Pero para la gente que te sigue
podrás ser revivido y reactivado; por medio de una computadora te indicarán cómo eras, cómo te movías, cuáles eran tus fobias, y luego te van a soltar por el mundo, para
que hagas otra revolución.
- Bueno, como es el primer experimento lo van a desactivar después del concierto.
- Sí, gracias también a la demanda que les hizo Yoko Ono, pero leí en una revista de
chismes que los cubanos ya están planeando una réplica de Fidel Castro ¿te imaginas?
¡qué peligroso!
- Ojalá le implanten un cerebro más democrático.
- El riesgo es que pueden revivirse Hitlers, Pinochets…
- Ay, no, Gerardo. Ya no sigas. Me está dando miedo. Tal vez el ser humano no está
preparado para esto.
- En fin. Tenemos nuevamente a Melchor Morán en la línea, desde Lennon City, así que le mandamos la señal. O él nos la manda a nosotros.
(Los ruidos electrónicos y la lejana multitud.)
- Estamos a punto de que aparezca el avión que transporta al replicante de John Lennon
a esta ciudad. El aeropuerto está atiborrado, y la gente se mece en enormes
oleadas al compás de la canción "Imagine", que aquí se ha convertido en un virtual
himno al amor y la paz... y por supuesto a John Lennon.
(Se aprecia la multitud entonando la famosa canción.)
- El día de ayer, a la llegada de los tres Beatles vivos a Lennon City, un hombre salió
inesperadamente de la multitud y, a pesar de las enormes medidas de seguridad que se
han tomado, pudo herir en el hombro a Paul McCartney cuando descendía de su limusina. El responsable resultó ser un desconocido músico de jazz que afirmó ser hijo del cantante. Ahí estuve con los micrófonos de 105 FM y, con muchos esfuerzos, logré
entrevistar al representante de la Music World Corporation, a George Harrison y a
Ringo Starr. Esto fue lo que me dijeron...
(Se escucha el ambiente de un aeropuerto abarrotado. Melchor nada entre docenas de reporteros que chocan entre sí sus grabadoras, apuntando el micrófono hacia los Beatles que llegan rodeados de elementos de seguridad.)
- How is Paul?
- We haven`t could support the inversion of an artifficial Beatle more. By luck, Paul
is all right and now doesn`t want to declare anything.
- Ana, Gerardo, John Jonhson, vocero de la Music World Corporation afirma que no
hubieran podido soportar la inversión en un Beatle más. Le voy a preguntar si es
verdad que el agresor de Paul era su hijo. John, Is that true about his son?
- I would know relling you. In a so diverse life such as the musics like Paul zize
anything can happen... -el hombre comienza a reír- However of being a jazz black singer.
- Thank you, John. Por aquí por favor. Espere. Estoy intentando acercarme a donde se
encuentra detenido George Harrison, rodeado de periodistas. George, George, for
Mexico... John Johnson me contó que afortunadamente Paul está bien y por el
momento prefiere no declarar nada. Que en las diversas vidas de los músicos con la
talla de Paul puede suceder cualquier cosa George, George...! Escuchemos...
- I have get protected about this contry law and the hole world for not leaving
posibilities of a cibernetic reproduction of me.
- Wouldn`t you like to live a little more after you die?
- No. Anyway we return in a live being after death.
- Acaba de llegar también Ringo Star a donde nos encontramos rodeando a George. Trataré… de llegar hasta él para llevarles su voz a todos ustedes. (Melchor forcejea entre la gente mientras sigue su narración) Harrison nos contaba que se protegió legalmente en Estados Unidos para evitar ser reproducido cibernéticamente. Escuchemos a Ringo.
- Yes, I Would like to have a cibernetic reproduction of me... -ríe- but in life.
I`m going to ask for one of those, we will got a good friends.
- Ringo dice que a él sí le gustaría ser reproducido cibernéticamente, pero en vida.
Dice que ya ha investigado los procedimientos, que serían grandes amigos.
David Chapman, el asesino de Lennon, dijo en su celda de Nueva York que, de poder
hacerlo, lo volvería a matar. Envío micrófonos a México. ¿Gerardo? ¿Ana?
- Te escuchamos muy bien, Melchor, adelante.
- ¿Bueno...? Yo los escucho muy mal. Cortamos un momento.
(Se escucha un ruido eléctrico y el corte de Melchor. Sobreviene música de fondo.)
- Por lo visto está a punto de aterrizar el avión amarillo que transporta al "ente"
Lennon, a tantos años de su muerte.
(Continúa mañana… el Concierto)
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