Es en 1911 cuando la Red Federal sufre mayores deterioros a causa de manos enemigas. Dadas las características del poste telegráfico, fue además un excelente soporte para colgar a centenares de prisioneros de todos los bandos. Y el cable, claro, usando como soga. Los periódicos de estas fechas no cesan de informar destrozos. El 13 de febrero los rebeldes enrolaron el alambre a la locomotora del ferrocarril, en Villa Ahumada, Chihuahua, y tumbaron varios kilómetros de línea. El 10 de marzo los rebeldes cortaron las vías telegráficas y telefónicas del crucero de Lucas Martín en una distancia de un kilómetro, colocando los alambres del telégrafo sobre la vía del Ferrocarril Interoceánico. El 16 de mayo se informa que se encuentra interrumpida la comunicación telegráfica con Tuxtepec: "parece que los rebeldes han cortado la línea en varios puntos", informa El Imparcial. Preocupado el gobierno maderista por los continuos destrozos de la línea telegráfica, se le ocurrió una ingenio...