Segunda parte de dos La industria poblana a principios del siglo XX repartía sus productos entre el consumo local de la ciudad y sus productos de exportación a la ciudad de México, Veracruz y otras partes de la república y el mundo. Además de la emblemática industria textil que producía básicamente telas, hacia 1925 había dos fábricas de lana, tres fábricas de lino, una fábrica de vidrios planos, cuatro fábricas de fideos, cuatro de aguardiente, cuatro de estampados, cinco molinos de aceite, catorce molinos de diversa molienda (de café, aceite, trigo, nixtamal ), siete cernideros, ocho ladrilleras y doce hornos de cal. Existían numerosas fábricas de diversos tamaños de panela y piloncillo, de mezcal, carbonato de sosa, cerillos, azúcar y loza fina. (5) Por su importancia económica y simbólica, destacan las fábricas textiles en Puebla, que serán arquetipo y fortaleza de la entidad en las primeras décadas del siglo. De 18 fábricas consignadas por Carlos Contreras Cruz a princip...