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Nadie te enseñó, pero sabes hacerlo

La música que interpreto ocurre conmigo y en mí

Kathia Buniasthivili

 


¿Cómo se consigue esa conexión musical?

Kathia: Es algo que siempre está ahí, aunque nunca le hayas prestado atención. Es como si te pregunto: ¿cómo aprendes a amar? Nadie te enseñó, pero sabes hacerlo, porque algo dentro de ti te lo ha enseñado. En el arte, en la música, esa conexión siempre está ahí, y uno mismo va aprendiendo a desarrollarla, a modificarla, a expandirla…

Beethoven

Kathia: Beethoven posee esa magia que te permite encontrar diferentes ápices de amor en fragmentos ínfimos de música. Por lo tanto, el acercamiento a cada una de las cuatro sonatas ha de ser diferente. Dentro de su universo musical, hay algo recurrente que parece augurar el futuro de su obra cumbre, y es que en cualquier fragmento de su producción podemos escuchar los primeros ecos de la futura Novena sinfonía. Ese espíritu de la Novena que, aunque todavía no haya sido compuesta, ya está viviendo en su música. Por otro lado, Beethoven es un compositor de contrastes. Expresaba su sentir de una forma muy directa. Escuchamos momentos de gran intimismo, en donde se puede apreciar ese amor universal hacia el mundo, y otros que rebosan de ira, en los que parece que las fuerzas de la naturaleza se alían para desencadenar una gran tormenta musical. Esa ira muchas veces muestra el amor que sentía y que no era comprendido por sus coetáneos. Él buscaba un bien universal mediante su música y le frustraba en exceso que esta utopía del bienestar que ansiaba no fuese del todo comprendida. La lucha de contrastes entre la ira y lo íntimo está presente en cada una de sus sonatas, y es parte de su alma musical.”

Tomado de https://scherzo.es/khatia-buniatishvili/

Foto de Instagram: @khatiabuniatishvili   

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